domingo, 4 de julio de 2010

Explosión Plataforma Petrolera


De todos es conocido que en el Golfo de México, la plataforma petrolera funcionada por la empresa British Petroleum (B.P.) explotó y se hundió en el mar, el pasado 20 de abril. El problema no paro allí, desde ese mismo día el derrame de petróleo no ha podido ser controlado: miles y miles de barriles se vierten a las aguas del golfo y sin solución a la vista.

  • Tema: Explosión plataforma petrolera
  • Fecha: Abril 21 de 2010
  • Hora: 03:00 GMT
  • Lugar: Golfo de México
  • Longitud: 87ºW00'
  • Latitud: 28ºN30’
  • Diferencia GMT: 00:00
  • Sistema de Casas: Placidus
  • Ascendente: 06º38’ de Sagitario
Cuando Sagitario es el Ascendente del evento que estamos analizando, empezamos a sospechar muy seriamente de que los cimientos o soportes fallaron, se debilitaron al punto de impedir que la estructura colapsara. Recuerdo que, en los eventos de la caída de puentes y de techos, Sagitario ha sido relevante, participe único de lo que haya originado la tragedia. Lo anterior, quedaría confirmado por la ubicación de Júpiter, el regente de Sagitario, en la casa cuatro, la de las raíces y los cimientos. La cuatro representa el fondo, y por Piscis hablaría claramente del fondo del mar.

Aunque lo anterior, ha sido totalmente válido en anteriores ocasiones, tengo que aceptar que en esta oportunidad es diferente, es decir, veo a un Júpiter en extremo muy fuerte y muy poderoso; y tanto por signo como por casa. Luego, no puedo aceptar que Júpiter sea la causa de la tragedia, pues tengo super claro que un benéfico en excelentes condiciones no podría actuar negativamente, causar daño alguno, o en el caso de ocasionarlo sería mínimo y bastante fácil de subsanar y/o reparar. El daño de un benéfico es uno sin mala intención, más bien puede ser por descuidos o errores, pero nunca provocados, siendo común el exceso de confianza cuando más o pasar el límite que se creía permitido. Entonces, por ahora lo único malo que podría causar tan poderoso y muy benéfico Júpiter es un error por exceso de confianza, por creer que todo está bien y no tomarse el trabajo de revisar exigentemente. Tras lo anterior, es claro que no podemos hablar de mala intención o incluso, de algo que raye con un atentado o similares males.

Si aceptamos que nuestro Júpiter no puede haber causado un mal tan grande, entonces, tenemos que buscar la causa que ha gestado la considerada como la peor tragedia petroleras de todos los tiempos en otro lado. ¿Si no es Júpiter la causa, dónde entonces la buscamos?

La respuesta no podría ser otra más que Saturno, el regente de los muros, las estructuras, las alturas y las montañas, por citar sólo significados acordes al tema que ahora nos ocupa. Una torre de explotación de petróleo es una enorme y pesada estructura, fría y aislada, desafiante en la oscuridad. Saturno tiene poder por disposición sobre Plutón en Capricornio, el que en su condición retrograda, sin duda es la mejor significación para un yacimiento de petróleo que se está derramando y sin poder ser controlado. Torre y yacimiento están conectados irremediablemente.

Entonces, está claro, que la afectación sufrida por Saturno terminaría afectando a Plutón. Saturno está peregrino, debilitado entonces, y retrógrado. Si algo está débil o enfermo, seguro, puede ser presa fácil de todo aquello que pueda dañarlo mucho más.

Clásicamente, el enemigo número uno de Saturno es Júpiter, modernamente Urano. Mas del grado de ubicación de Saturno en Virgo, enemigos son Júpiter y sobre todo Venus. En los anteriores bien podemos buscar la causa o causas de la explosión de la torre de petróleo. Urano, de entrada, se destacaría por su aspecto cerrado de oposición con Saturno, pues bien conocido es por su regencia sobre todo aquello que sea explosivo o que se rompe de un momento para otro. La electricidad y las tecnologías modernas son otras de sus dos regencias. Aceptamos entonces que un fallo repentino, totalmente inesperado, explotó la torre. Un fallo eléctrico o tecnológico aconteció. Nos preguntamos: ¿Qué lo causo? ¿Qué lo permitió? ¿A quién culpamos? Las rupturas y los cambios bruscos igual son asuntos de Urano.

A Venus, planeta que más negatividad demuestra en el signo de Virgo, le cuesta mucho adaptarse al mismo, es al que culparíamos. Antes de profundizar en Venus, quiero dejar muy claro que descarto por completo una falla humana voluntaria como la causa única de la explosión.

William Lilly enseña que el Ascendente y la Luna representan el barco (la plataforma en nuestro caso) y el regente del Ascendente regenta la tripulación (el personal que trabajaba en la plataforma). Si vemos a Júpiter en tan excelentes condiciones, además sin aspecto negativo cercano a Saturno, entonces no se puede pensar que los funcionarios o los operarios se hayan equivocado tan fatalmente, o al menos, con la intención seria de querer hacerlo. Si el Ascendente y la Luna representan a la plataforma y a su carga (el petróleo en nuestro caso), es muy claro, al saber al Ascendente libre de toda afectación y a la Luna bien en Cáncer y sin malos aspectos, que ninguno de los anteriores ha sido la causa del desastre. Participan del desastre, sí, pero no son la causa del mismo. La Luna está saliendo del poderoso aspecto de trígono con Júpiter (ambos en sus signos de regencia), una razón suficiente para descartar por completo la falla humana provocada como origen del desastre, como por ejemplo, haber presionado el botón equivocado.

John Frawley, al que considero el mejor astrólogo del mundo, en la página 318 de su estupendo libro titulado La Verdadera Astrología, escribió: “El hecho de que este planeta, ....., sea tan fuerte, es un claro indicador de que es posible confiar en él: todos los planetas se comportan mejor cuanto más fuertes son. Incluso los maléficos, Marte- Saturno, muestran sus mejores aspectos cuando son esencialmente fuertes, del mismo modo que los benéficos, Júpiter y Venus, pueden desplegar virtudes corrompidas cuando son débiles.”


Ahora, sin más pausas, disparemos dardos sobre Venus. Lo primero, que impacta, es verlo en uno de sus dos signos de regencia: Tauro. Pero ubicado en una de las dos peores casas para los planetas. Muy fuerte esencialmente, pero débil accidentalmente. La sexta, es la casa de la enfermedad y la dolencia. Las partes arábigas de la enfermedad (16º16’ de Libra) y la fatalidad (04º49’ de Tauro) están dispuestas por Venus. Lo peor que le podría pasar a Venus, del que insisto, es el planeta que más problemas tiene con el signo de Virgo, la ubicación de Saturno, es estar en conjunción con la más maléfica de todas las estrellas fijas: Algol (la cabeza de la Gorgona Medusa). Vivian Robson, en su afamado libro de las estrellas fijas, al respecto nos escribió: “De la naturaleza de Saturno y Júpiter. Provoca desgracia, violencia, decapitación, ahorcamiento, electrocución y tumultos. Genera una naturaleza terca y violenta, que causa la muerte al nativo o a otros. Es la estrella fija más maléfica del cielo.”

Cuando un planeta, cualquiera sea, es fuerte por esencia, pero débil accidentalmente, suele generar errores o serios problemas en los procedimientos o secuencias que son rutinarios (casa), pero que no pueden ser detectados a tiempo (signo), y teniendo inclusive todos los equipos necesarios para hacerlo correctamente. Para que se entienda mucho mejor lo de una debilidad accidental (la que enferma a Venus), quiero recrear lo que John Frawley escribió al respecto:

“ Estas dignidades y debilidades accidentales son muy significativas. Consideremos un tigre: tiene una fuerza enorme por sí mismo (dignidad esencial), pero si ha caído en una trampa para cazar tigres (debilidad accidental), aunque sigue teniendo la misma fuerza, prácticamente carece de capacidad de acción. Estas cualidades accidentales no son parte de la naturaleza inherente de la cosa en cuestión, pero le influyen, para bien o para mal, en ese momento y lugar.”

Aplicar lo anterior a Venus, el que considero como la causa que origina la explosión, podemos decir lo siguiente: Venus, en la sexta casa, se refiere a los empleados en general, que por estar en Tauro nos hace observar a unos empleados que conocen a la perfección su quehacer diario, están suficientemente capacitados, sin duda, mentalmente son bastante diestros (signo); mas su problema es que dan por hecho que todo lo hacen siempre bien, y que no es factible que pudieran cometer un error fatal (casa). Hace mucho tiempo que aprendimos que los errores accidentales de Venus se dan para cuando cree que todo está en su lugar, en el correcto, que todo está funcionando a la perfección, que todos los controles y seguridades están activadas y en su lugar, que la calidad será siempre la resultante a obtener (ahora, sin duda, creo yo, se entienden bien las razones por las cuales Venus jamás podría encajar en el signo de Virgo). La casa sexta, es la casa de los recursos disponibles, de las materias primas, de los equipos y herramientas, de la calidad de todos los anteriores y de los obreros.

En definitiva, estamos ante un error cometido no por la falta de los conocimiento o del entrenamiento suficientes del personal a cargo del funcionamiento técnico y/o mecánico de la plataforma, no, nada de eso, es un error por exceso de confianza, de creer que todo está funcionando muy bien; y para cuando el error es detectado ya es demasiado tarde, similar a lo sucedido el 26 de abril de 1986, cuando exploto el reactor número tres en Chernobil – URSS.

El fallo de Venus, dentro de la casa sexta, genera que Urano se active y destruya (oposición) la torre de explotación petrolera (Saturno). Lo anterior, se entiende mejor al saber a Urano ceñido al grado de la máxima exaltación de Venus en el signo de Piscis. Saturno se ciñe al grado de máxima caída de Venus en Virgo. Diría, que la explosión daña los cimientos (casa cuatro) y ello explica el posterior hundimiento de la plataforma. Simbólicamente, se puede asumir que Urano explota y destruye los pies (Piscis) de la estructura petrolera.

Tauro regenta el cuello, lo que lleva a pensar en las dolencias de esta parte del cuerpo y por analogía determinar las mismas fallas en el conjunto de la plataforma petrolera. Lo peor que le puede pasar al cuello y a la garganta, lo que más los enferma y que pone en riesgo la vida de la persona, son entre otros el ahogamiento y el estrangulamiento. Algo así como un taponamiento que impide el ingreso del aire. Las inflamaciones son otras de las dolencias.
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Creo, eso espero, que después de todo lo anterior las conclusiones salten a la vista: una explosión por fallos que sin ser intencionales, no son descubiertos a tiempo, cuando se intenta solucionarlos es tarde.
Lo mejor será esperar que para cuando Saturno ingrese en el signo de Libra, su exaltación, por lo menos el yacimiento abierto pueda ser sellado, pues la verdad es que los daños ecológicos y ambientales sólo podrán ser sanados cientos de años después. Lo anterior, sobre Saturno, es algo que ya escribí en un mensaje que envíe a las diferentes listas mundiales de astrólogos, de ahí que considero muy oportuno recuperarlo y poder leer mi primer acercamiento al tema que hoy nos convoca. Sirve el mismo, para al menos, prever las fechas en las que una solución pueda darse. Leámoslo entonces:

“ Importante que en las listas mundiales se empiece a tomar con interés la crisis del derrame de petróleo en el Golfo de México. Lastimosamente, no se tiene la precisión sobre la hora exacta en que sucede la explosión de la plataforma de explotación, pues sin duda, es el momento en que todo empieza y que hoy en día sigue sin ser solucionado, por el contrario, da muestras de no tener una pronta solución en los días que están por venir. Es una pena que tragedias como la anterior sucedan, pues en últimas el medio ambiente es el que siempre paga las consecuencias de los errores humanos.

A falta de la precisión suficiente de la hora de la explosión de la plataforma, lo mejor es tomar otro momento importante para tratar de saber algo más al respecto, y que mejor momento que aquel en que el presidente de la British Petroleum (B.P.) se dirige, más que a sus accionistas, al mundo entero para tratar de explicar en qué va el problema del derrame, sobre qué soluciones se están implementando y qué esperan ellos en adelante.

Los datos del momento exacto en que empezó la conferencia del presidente de la B.P. son: Junio 04 de 2010, 13:00 GMT, Londres – Inglaterra. Ascendente: 28º26’ de Virgo.

Lo importante de esta Carta, más que confirmar la crisis existente, es tratar de determinar cuándo podría llegar a su final. En lo personal, se me ocurre que la clave, inicialmente, está en uno de los dos siguientes planetas: Saturno o Plutón. Las fechas en las que Saturno ingrese en Libra, o Plutón regrese a directo, son a mi entender las fechas más factibles en las que una solución sustancial se materialice. La fecha de Saturno (Julio 21) sería a corto plazo, la de Plutón (Septiembre 14) a largo plazo. La otra fecha en la que podemos esperanzarnos, es la marcada por la conjunción de la Luna con Júpiter en el último grado de Piscis; un total de 20 grados en promedio, de tal suerte que es un tiempo que inicialmente lo pedemos ajustar a días, semanas o meses como máximo.

De mi parte, considero que sobra todo comentario, pues la Carta, ella sólita, es suficiente para verificar lo mal que han estado las cosas, que están y estará, tal cual lo hemos venido observado.

Giovanni Londoño Romero

Santiago de Cali – Colombia, junio 17 de 2010.

Fin del Mensaje.

Giovanni Londoño Romero

Santiago de Cali – Colombia, julio 02 de 2010.

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