Astrología Médica - La Luna

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Ø  La Luna

Vitaminas: La riboflavina (vitamina B-2).

Minerales: potasio.

Mientras que el Sol, por signo y aspectos, muestra la cualidad constitucional del cuerpo, la Luna nos dice sobre las condiciones de salud. Debido a esta sensibilidad, la Luna es un buen indicador de cuándo se debe ir a una operación o no. Por ejemplo, una persona no debería someterse a una operación en una Luna vacía de curso. Por lo general una Luna vacía de curso, significa que la cirugía no se hará correctamente, más complicaciones se darán, y será necesario,  una segunda operación. Una vez tuve un cliente que, en contra de mi consejo, se sometió a una operación de nariz en un día en donde la Luna estaba vacía de curso y ella tuvo que regresar dos veces más. Para su cuarta operación volvió hacia mí y me preguntó sobre una fecha adecuada.

 La posición del signo de la Luna en tránsito también puede indicar tiempos favorables o desfavorables para las operaciones. En general, la Luna en tránsito debe estar en un signo fijo (Tauro, Leo, Escorpio, Acuario). La Luna en tránsito en los signos fijos ayuda a asegurar que la operación resulte según lo planeado y ayudará a mantener las manos del cirujano estable, sin complicaciones adicionales.

 Posiblemente el peor momento para la cirugía es cuando la Luna está en un signo mutable (Virgo, Géminis, Piscis, Sagitario). Esos son los momentos de exceso de flexibilidad: ¿quién quiere ir a por una operación de vesícula biliar y que luego el cirujano decida quitar también el apéndice?

Una persona que probablemente no debería también someterse a una operación en esa parte del cuerpo regida por el signo donde la Luna se encuentra en tránsito. En otras palabras, para una operación de vesícula biliar (regida por Capricornio), la persona no debe someterse a la cirugía con un tránsito de la Luna en Capricornio. Una operación de la vesícula biliar no debe realizarse cuando la Luna transita por Cáncer, la polaridad de Capricornio; por lo general se debe evitar el signo contrario en cuanto sea posible, porque no hay un reflejo definido  debido a una acción involucrada.

La cantidad de líquidos en el cuerpo también determinará la mejor época para la cirugía. En general, la Luna es responsable de las mareas de los líquidos en nuestro cuerpo (los niveles de suero, agua, sangre, etc.). Al igual que las mareas del océano, los fluidos en nuestro cuerpo están sometidos al mismo proceso dentro de nuestra caparazón física. En las fases de la Luna, estos niveles tienden a disminuir o aumentar. En el momento de la Luna nueva, los fluidos se encuentran en sus puntos más bajos, y como resultado hay una pérdida de peso. Por lo tanto, el mejor momento para una operación es de cinco días antes o después de la luna nueva, cuando hay menos posibilidades de inflamación, sangrado o moretones. Por el contrario, nunca se someta a una cirugía cinco días antes o después de una Luna llena, cuando los fluidos del cuerpo se encuentran en su nivel más alto y puede causar hinchazón excesiva, hemorragias o infiltración de las heridas. Dado que la Luna regula los fluidos corporales, su posición en tránsito también puede determinar si hay o no necesidad de suministrar riboflavina.

Por ejemplo, el líquido en el cráneo se encuentra en su nivel más alto durante la Luna llena, ejerciendo presión en el cerebro y que podría hacer que una persona que  necesita de riboflavina se vuelva más fácilmente irritable o sensible. Por lo tanto, si una persona está sufriendo de una deficiencia de riboflavina, los síntomas pueden ser más graves en unos cinco días antes de la luna llena, y la deficiencia puede disminuir hacia la Luna nueva.

Además, la cantidad de necesidades de potasio de una persona puede ser determinada por las mareas del cuerpo. Los líquidos que rodean las células, así como nuestras pérdidas o ganancias de peso de agua dependen del potasio. Una mujer que tenga planetas en Cáncer o una Luna fuerte en su carta natal en particular, pueden incurrir en aumentos de peso o pérdidas de cinco libras al mes, esto depende únicamente de la distribución de fluidos en su cuerpo. Si el líquido se conserva y no se evacúa a través de sus diversos canales de eliminación, se notará un aumento de peso alrededor de cinco días antes de la luna llena de cada mes. Hacia la Luna nueva el aumento de peso disminuirá y el cuerpo estará en su marea baja. Gran parte de este problema puede ser controlado por las cantidades adecuadas de potasio que están disponible en el cuerpo para mantener los fluidos en equilibrio.

Una Luna prominente en la carta natal también indicará generalmente una persona sensible a las drogas. En particular, si la Luna es el patrón de una carta  o si está en conjunción con la cúspide de la primera o la décima dentro de los ocho grados, el paciente debe recibir una dosis más baja de cualquier medicamento (aproximadamente 1 / 2 de la dosis habitual). Por último, la posición de la Luna en una carta natal le ayudará a determinar las necesidades emocionales de una persona. La buena salud no es sólo una cuestión de comer los alimentos apropiados, es un entretejido de la dieta, las emociones y actitudes mentales. Si las emociones no se dirigen correctamente, son suprimidas o reprimidas, se pueden acumular y podrir en la mente subconsciente. Tal enconado es el equivalente a un microbio viral que al entrar en el cuerpo queda en un estado de hibernación hasta el momento en que entra en erupción en una enfermedad. Si las emociones tales como sentimientos de culpa, la ira y los celos no son debidamente tratados, pueden causar enfermedades.

 

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