viernes, 21 de noviembre de 2014

Revoluciones solares y lunares II - Morín

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1.      La similitud del significado de una revolución con la genitura trae hacia adelante las cosas significadas en la genitura. Pero la disimilitud suprime o las retrasa, o las cumple de manera mínima o las corrompe. Y por lo tanto lo que se lleva a cabo por una revolución sin duda debe estar presignificado en la natividad. Pero todo lo que está presignificado en la natividad para cualquier año en particular, no se lleva a cabo por la revolución de ese año, por la falta de similitud con lo que se predice, que es accionar el potencial de la genitura y sus direcciones en las cosas significadas. Por lo tanto Cardan advierte con razón que nada debe pronunciarse sobre las direcciones radicales sin haber inspeccionado la revolución del año indicada por la dirección - pero de hecho también a lo inmediatamente anterior o posterior; de lo contrario, incluso el mejor astrólogo será engañado.

2.     Cuanto la figura de la revolución, ya sea solar o lunar, sea  más similar a la posición radical de los signos y los planetas, más eficazmente traerá las significaciones de la genitura, ya sea bueno o malo, y en especial aquellas que están significadas por una dirección similar. Para esa que es similar no siempre es favorable y no promete algún gran bien, como Origanus y muchos otros suponen, sino que sólo significa lo mismo que la figura de la genitura, ya sea buena o mala. De lo contrario, los planetas no actuarán de acuerdo con sus determinaciones; y una afluencia maléfica en una natividad sería corregida por una maléfica similar, o sería cambiada por completo, lo cual es incompatible con la experiencia y la naturaleza. Pero esta mayor similitud (por lo menos en la posición de los signos) se puede adquirir o viciarse  por el viaje de los nativos a los lugares apropiados de la tierra para la época de la revolución, y especialmente para la del Sol, como ya se dijo en el capítulo 4. Y esto es un secreto de la ciencia que de ninguna manera debe ser despreciado. Y, en particular, aquellas revoluciones deben ser vigiladas para en el mismo grado de la eclíptica en el que se encuentra el Ascendente como es el Ascendente del rádix; porque entonces cada planeta rige las mismas casas en la revolución, ya que usualmente no ocurre, sin (producir) algún efecto notable significado por el nacimiento, ya que la fuerza de la significación de los signos también se duplica, al menos, en el lugar de la Natividad y sus alrededores.

Morín
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