UN CASO RETORCIDO DE ASTROLOGÍA HORARIA

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UN SALUDO MUY FRATERNAL Y CALUROSO A TODOS NUESTRO SEGUIDORES(AS) Y LECTORES(AS). Permítannos hacer un break (ruptura) con relación a nuestro temas sobre astrología clásica que actualmente se debate en nuestro Blog. A continuación presentamos una serie de artículos de la International Society of Classical Astrologers (Sociedad Internacional de Astrólogos Clásicos)... vamos con el primer caso:

UN CASO RETORCIDO DE ASTROLOGÍA HORARIA.  (By Pablo Ianiszewski - International Society of Classical Astrologers)

La Escuela Virtual de Astrología rinde tributo y homenaje de admiración a Pablo Ianiszewski por esta gema preciosa de astrología horaria, que esperamos sea de estudio y profundas reflexiones.

 Pablo Ianiszewski es un astrólogo tradicional de Chile y se graduó del Diplomado en Astrología Medieval de Robert Zoller (DMA). Trabaja con técnicas Horarias, Electivas, Natal y Mundanas, mientras hace énfasis en la filosofía Hermética y Neoplatónica detrás de su trabajo como una guía indispensable para una comprensión profunda del oficio.

Enseña astrología en el Centro Astrológico de Chile con un equipo de colegas. También participa como ponente en congresos y simposios de forma habitual, así como colabora con diversas publicaciones españolas sobre astrología y esoterismo tradicional. Pablo habla español, italiano e inglés, además de poseer conocimientos en griego clásico y latín. Tiene una licenciatura en psicología y una maestría en psicoterapia.

 EL CASO

Hace unas semanas trabajé en una consulta horaria que tuvo un curioso desenlace, resultado que comparto aquí para proponer una reflexión sobre los alcances de nuestro arte. Creo que lo que sucedió ilustra bastante bien las extrañas formas en las que el destino tiene que manifestarse en nuestras vidas. La historia puede parecer un tanto engañosa, pero mirando más en profundidad podemos descubrir una dimensión interesante respecto a lo inevitable. Una joven se puso en contacto conmigo por una intervención estética que quería tener. Era un tatuaje sutil para simular cejas, ya que pensaba que tenía muy pocas. Recibí la consulta a través de una video-llamada el lunes 15 de julio de 2019 a las 9:34 pm en Reñaca, Viña del Mar, Chile. La pregunta concreta fue:

¿MI INTERVENCIÓN DE CEJAS TENDRÁ UN BUEN RESULTADO?

Publico esta consulta y su resultado bajo la autorización expresa de la consultora, pero manteniendo su identidad en total reserva como lo exige la ética del oficio. Según consideraciones antes del juicio tenemos ante nosotros una carta radical, por lo que se puede interpretar con la certeza de que habla del sujeto consultado. Observamos al ascendente a 09°17′ Piscis, siendo Júpiter, y secundariamente la Luna, los significadores de la consultora y de sus cejas. Dado que se trata de una cuestión de estética, es decir, un asunto relacionado con la apariencia física y no con la cirugía por razones de salud, nos preocuparemos por el estado zodiacal y la determinación local del regente ascendente y la Luna, independientemente de la sexta casa o significadores asociados. Será ideal encontrar un regente de la 1ª casa y una luminaria nocturna en buen estado, asociados por un buen aspecto a Venus, significante natural de belleza. También sería prometedor encontrar a Venus angulosa y bien dignificada.

¿QUÉ ENCONTRAMOS AL ANALIZAR ESTA FIGURA ASTRAL? Lamentablemente Venus no es como hubiéramos esperado, encontrándose peregrina en la mitad de Cáncer, moviéndose rápido, oriental y teniendo dominio sobre el grado ascendente como ALMUTEN DOMUS. También está bajo combustión, por lo que su luz se ve gravemente obstaculizada por el fuego solar. Lamentablemente, no tiene una dignidad esencial para resistir tal ardor, ya que atraviesa un grado en el que se siente extraviada. Por otro lado tenemos a Júpiter, regente del signo ascendente, muy bien dignificado y posicionado, teniendo fuerza por domicilio y triplicidad nocturna en la mitad de Sagitario, además de estar dentro de una casa angular con elevación sobre medio cielo, mientras Marte le aplica un trígono, significador natural de cirugías, cortes e incisiones. Desafortunadamente, ese Júpiter fortalecido está retrógrado y se está separando de una contrantiscia con la Venus relevante. La Luna está creciendo y aplicando por antiscia a Júpiter, estando en hayz y sucesivamente, pero mezclando triplicidad nocturna con un detrimento severo, y moviéndose lentamente a través de Capricornio, donde está siendo afligida por conjunción aplicativa con Saturno retrógrado. No obstante, destaca la recepción de Venus por la Luna mediante oposición.

¿QUÉ PODRÍAMOS CONCLUIR DE TODO LO ANTERIOR?

La consultora tendrá un procedimiento estético bien realizado que la dejará satisfecha con buenos resultados (recepción de Venus por la Luna (Venus ama a la Luna), alta dignidad esencial de Júpiter) pero sufrirá un dolor agudo e intenso que la hará lamentar el momento (combustión de Venus, retrogradación de Júpiter en contrantiscia con Venus, detrimento de la Luna en conjunción con Saturno retrógrado). Aunque estará feliz al mirarse en el espejo, la experiencia la dejará con un mal recuerdo. El resultado de la predicción se cumplió por completo pero de una manera misteriosa, que incluso podríamos considerar RETORCIDA O PERVERSA. El día de la intervención todo se desarrolló con normalidad. El trámite se llevó a cabo de forma impecable, sin problemas ni retrasos. La consultora me confesó que, mientras recibía pequeños cortes y pinchazos en las cejas, recordaba mis palabras preguntándose en qué punto sentiría el dolor que le había predicho. PENSARÍA: PABLO ESTABA EQUIVOCADO. La intervención concluyó con éxito, con mínimas molestias físicas y casi sin sangrado. Pero el destino aún no había terminado su propio trabajo. Finalizado el proceso, la esteticista solicitó autorización a la consultora para realizar una fotografía de sus cejas recién intervenidas, con el fin de registrar el efecto visual logrado. El teléfono celular con el que pretendía tomar la foto era enorme, casi tan grande como una tableta. Su gran tamaño sorprendió a nuestro cliente, que no había visto antes un artefacto de esas dimensiones. He aquí, en una incomodidad inexplicable, la esteticista acercó el dispositivo a la cara del cliente y dejó caer el pesado teléfono inteligente directamente sobre el tabique nasal y las cejas de la niña, dándole un golpe certero y brutal. El dolor fue tan fuerte que nuestra protagonista lloró durante media hora sin poder parar, mientras la esteticista, desesperada y sin saber qué hacer, se derrumbaba en disculpas.

Le juró a la chica que nunca había cometido un error como este en todos sus años de trabajo, a pesar de que tomó fotografías de todos sus clientes, tanto antes como después del procedimiento. Una vez cumplidos los hechos, la consultora me llamó para decirme que el dolor era de tal magnitud que lamentó profundamente, pero más por haber dudado de mi oráculo que por la intervención en sí. Lo ocurrido debería hacernos reflexionar sobre lo fragmentaria y reducida que es nuestra capacidad para comprender los diez mil caminos que puede recorrer el devenir para realizar sus propios planes.

En astrología es común conocer el fin de las cosas, hasta el punto de poder predecir el desenlace de todo tipo de cuestiones, desde las más pequeñas hasta las más grandes, desde las preocupaciones más pedestre de los individuos hasta los asuntos más espinosos de una república. . Sin embargo, el camino que recorrerá el destino para manifestar el juicio de las estrellas siempre permanece arcano e inaccesible. La sabiduría del rey Salomón tiene sentido cuando en Eclesiastés 11: 5-6 nos dice que:

“5 Así como no sabes por dónde va el viento ni cómo se forma el niño en el vientre de la madre, tampoco entiendes la obra de Dios, creador de todas las cosas.

6 Siembra tu semilla en la mañana, y no te des reposo por la tarde, pues nunca sabes cuál siembra saldrá mejor, si esta o aquella, o si ambas serán igual de buenas.”.

 Pero, agregamos aquí, algo germinará como lo prometió la semilla, tal vez no en el campo sino en el jardín; quizás no en el jardín sino en el mástil; tal vez no en la masilla, sino incluso debajo de tu cama…. pero germinará.