ASTROLOGIA Y DESTINO - XII

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 ASTROLOGÍA Y DESTINO BY LIZ GREENE

Los griegos, al igual que los sumerios, imaginaban un elaborado rito de entrada al inframundo; pero su escenario mítico es diferente. Las almas de los muertos deben cruzar el río Estigia, transportadas por el antiguo barquero Caronte, que exige su moneda a cambio. Aquí, como en las puertas de ERESHKIGAL, se debe dar algo, algo de valor que sea posesión propia. EL DINERO ES UNA DE NUESTRAS IMÁGENES DE VALOR, MÉRITO, IDENTIDAD Y PROPIEDAD DEL EGO. Parece que lo que atesoramos debe entregarse durante el descenso: las insignias y la ropa con las que nos definimos y nuestro sentido habitual de valor, nuestra autoestima intachable, nuestro alto precio. El sentimiento de inutilidad, de falsedad y de asco por el propio vacío, de desilusión por la vacuidad de los adornos que solían significar tanto, es algo que he oído expresar repetidamente a quienes atraviesan los tránsitos y progresiones de Plutón. Esto no se limita a los aspectos denominados "malos", sino que se aplica también a los trígonos y sextiles. Parecería que la aceptación de esta sensación de estar despojado, humillado y vacío es un requisito previo necesario para el acólito que está en las puertas.

A continuación se presenta el sueño de un hombre que vino a una lectura del horóscopo mientras Plutón en tránsito estaba haciendo una larga conjunción con su sol natal en Libra, ubicado en la décima casa. Era un exitoso editor de libros de texto científicos, con una compañía internacional que le proporcionaba unos ingresos considerables y un lugar respetado en la sociedad. Siempre se había identificado con esta personalidad, ya que le daba su sentido de logro e importancia. Que también le proporcionaba un medio para cumplir el sueño de su madre de tener un hijo exitoso y brillante aún no se le había ocurrido como motivo principal en su elección de carrera, aunque muchos astrólogos podrían ver con sospecha la unidad de identidad entre madre e hijo que sugiere el sol en la décima casa. Me contó su sueño durante la interpretación de la carta, porque yo había hecho referencia a algunas de las imágenes y sentimientos relacionados con Plutón que he mencionado anteriormente: muerte, falta de vida, depresión, aislamiento y sepultura.

Sueño que he muerto y que ahora estoy esperando algún tipo de renacimiento o resurrección. En lugar de una cabeza, hay un cráneo descarnado entre mis hombros. Es horrible sentir este cráneo. Estoy muerto, podrido, inaceptable. En una habitación a la derecha, todos los libros y revistas que he publicado están expuestos como trofeos en vitrinas de cristal. Algunos amigos vienen a invitarme a cenar, pero se quedan horrorizados al ver mi cráneo. Intento explicarles que estoy muerto pero que me espera otra vida. Pero solo muestran disgusto y me dejan solo. En otra habitación se está llevando a cabo mi funeral. Mi madre llora desconsoladamente sobre mi ataúd. No puede verme, ni la parte de mí que queda. Para ella estoy completamente muerto.

Este sueño realmente no requiere interpretación. Se describe a sí mismo bastante adecuadamente como una imagen interior de la experiencia de Plutón y como un comentario profundo sobre el significado de este período en la vida de mi cliente. Aunque el sueño le pareció incómodo y perturbador, dijo que le había dejado una sensación de esperanza durante un período de gran depresión y desesperación. En resumen, el sueño le transmitía -y no estaba bajo ningún tipo de psicoterapia, sino que él mismo había aprendido las ideas- un sentimiento de que su depresión era necesaria en algún sentido que no podía comprender. La imagen de la calavera no es simplemente una imagen de la muerte; aparece con gran frecuencia en el simbolismo alquímico y es esa parte del ser humano que no se descompone como lo hace el cuerpo. Es el CAPUT MORTUUM, la cabeza muerta que queda después de que el fuego purificador ha quemado las escorias. En su vida exterior, la situación que parecía desencadenar la depresión de mi cliente fue su decisión de vender su empresa y dedicar sus energías a cultivar una gran extensión de tierra que había comprado en Australia.

Había esperado sentirse alegre y entusiasmado con esta empresa, pero en cambio se deprimió y se angustió. Este estado de ánimo desagradable, que le sobrevino como una violación, no tuvo sentido hasta que empezó a comprender que tal decisión significaba la muerte del poder de la madre en su vida, con todas las implicaciones internas que tal separación conlleva. Cuando los fantasmas descienden al Tártaro, cuya entrada principal se encuentra en un bosque de álamos negros junto al arroyo del Océano, cada uno de ellos recibe de sus parientes piadosos una moneda depositada bajo la lengua de su cadáver. De este modo pueden pagarle a Caronte, el avaro que los lleva en un barco loco a través del río Estigia. Este odioso río limita con el Tártaro por el lado occidental y tiene por afluentes el AQUERONTE, EL FLEGETONTE, EL COCITO, EL AORNIS Y EL LETEO. .. Un perro de tres cabezas o, según algunos, de cincuenta, llamado Cerbero, guarda la orilla opuesta de la Estigia, listo para devorar a los intrusos vivos o a los fugitivos fantasmales.

Los álamos negros, como señala Robert Graves en un pasaje posterior, son sagrados para la diosa de la muerte. Los nombres de estos ríos del inframundo son evocadores y también explícitos: STYX, que significa "odiado", contiene aguas que son un veneno mortal, pero que también pueden conferir la inmortalidad; ACHERON significa "corriente de aflicción"; COCYTUS significa "lamento"; AORNIS significa "sin pájaros", LETEO "olvido" y FLEGETONTE "ardiente". Todas estas imágenes recuerdan al sentimiento del Plutón astrológico.

El veneno de STYX es como el ácido del resentimiento profundamente enterrado, que es una manifestación típicamente plutoniana. Esta amargura implacable nos conecta con las figuras de las implacables Erinias, los servidores de la justicia. Ciertamente hay un veneno de venganza en Plutón, el fantasma voraz de Clitemnestra que azota a las Erinias para que persigan a su hijo Orestes. Aquí no hay compasión ni curación; sólo odio negro e interminable. SABEMOS POR NUESTROS TEXTOS ASTROLÓGICOS TRADICIONALES QUE LOS ESCORPIO ODIAN BIEN Y NO SE OLVIDAN DE LOS DESAIRES Y LAS HERIDAS. PLUTÓN TAMPOCO. La experiencia del planeta a menudo sumerge al individuo en su propio potencial, previamente no reconocido, de un odio profundo, duradero e implacable. MOIRA COMO NATURALEZA NO OLVIDA UN INSULTO NI IGNORA UNA VIOLACIÓN. El espíritu del mito cristiano, con su figura de misericordia y compasión, es la antítesis directa de ERESHKIGAL, que es el corazón negro de la naturaleza que no puede olvidar su sufrimiento. TOLKIEN encarna este corazón venenoso de la naturaleza en la figura del Viejo WILLOW en El Señor de los Anillos: las palabras de Tom dejaron al descubierto los corazones de los árboles y sus pensamientos, que a menudo eran oscuros y extraños, y llenos de odio hacia las cosas que van libres sobre la tierra, royendo, mordiendo, rompiendo, cortando, quemando: destructores y usurpadores. ..

Pero nadie era más peligroso que el GRAN SAUCE: tenía el corazón podrido, pero su fuerza era verde; era astuto y un maestro de los vientos, y su canto y su pensamiento corrían por los bosques a ambos lados del río. Su espíritu gris y sediento extraía poder de la tierra y se extendía como finos hilos de raíces en el suelo y como invisibles dedos de ramitas en el aire, hasta que tuvo bajo su dominio a casi todos los árboles del Bosque, desde el Seto hasta las Colinas. El río de odio y veneno que rodea el inframundo es como el Viejo Sauce en el corazón del bosque, y no siempre es consciente en el individuo. Más a menudo no sabemos de su existencia y nos consideramos personas decentes que pueden perdonar a otro su transgresión; pero en cambio sufrimos misteriosas dolencias y trastornos emocionales, y saboteamos sutilmente a nuestros socios, padres, amigos, hijos y a nosotros mismos sin reconocer del todo que en algún lugar podemos sentirlos como "destructores y usurpadores" a quienes hay que hacer pagar.

Quizás también en este caso sea apropiado un ritual, y el mito ciertamente nos lo ofrece. El odio de ERESHKIGAL se suaviza con los dolientes de ENKI, dos pequeñas criaturas que el dios del fuego ENKI crea con la tierra que tiene debajo de las uñas. Estos pequeños dolientes descienden al inframundo y lloran junto a ERESHKIGAL mientras ella sufre y desahoga su rencor. Reconocen su dolor, lo escuchan, se solidarizan con ella; no la juzgan, ni la llaman fea, malvada u odiosa, ni intentan que "haga" algo al respecto. Representan una cualidad que considero esencial para tratar con Plutón, que muchos psicoterapeutas llaman la capacidad de "estar con" alguien. Es la provisión de un recipiente para las aguas venenosas sin la necesidad de "cambiar" las cosas. LAS ERINIAS TAMBIÉN SE APLACAN, EN EL MITO DE ORESTES, CON ESTE MISMO RECONOCIMIENTO GENTIL. ATENEA LAS ESCUCHA, NO DISCUTE NI CONDENA, SINO QUE LES OFRECE UN ALTAR Y UN CULTO HONORABLE A CAMBIO DE LA VIDA DE ORESTES.