LOS PRINCIPIOS GENERALES DE ASTROLOGÍA - CXXXVII

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LOS PRINCIPIOS GENERALES DE ASTROLOGÍA

Aleister Crowley y Evangeline Adams

El Sol en los Signos

El Sol representa la Individualidad, así como la Luna expresa la Personalidad. También gobierna la constitución, y es la fuerza vital y la columna vertebral de todo el sistema. Donde el Sol es fuerte, por la posición de los aspectos, da fuerza de Carácter, una Voluntad poderosa y una constitución vigorosa, todo lo cual contribuye a que la vida sea exitosa. Donde el Sol es débil, hay peligro de vida corta, o rota por la enfermedad, o por mucha desgracia.

En este volumen, no se considerará el significado de los decanatos de los signos, como por ejemplo: Aries se subdivide en tres secciones de 10° cada una, regidas respectivamente por Marte, el Sol y Júpiter. Estos puntos, aunque importantes en el examen minucioso de las natividades de las personas con respecto a las cuales es posible obtener datos exactos, son demasiado exhaustivos para ser considerados en un trabajo de este tipo. No se puede enfatizar demasiado, nuevamente, que un análisis del significado de cada factor en astrología depende de su relación con cualquier otro factor. Por ejemplo, el Sol en cada signo tiene una cierta influencia definida que ejerce invariablemente, pero esa influencia, así ejercida, se combina con todas las demás influencias del Sol, en la posición de su casa y en sus aspectos, así como en referencia al Sol, por signo ascendente y otras posiciones y aspectos planetarios.

Así, es a partir de la suma de las fuerzas, y no de cada una de ellas juzgada por separado, que se hace un análisis. El lector debe recordar, por lo tanto, que leer [cualquier] análisis del Sol en un signo como un análisis, palabra por palabra, de la posición solar en una natividad, leerlo excepto como una de las fuerzas de una natividad para unirse, acentuado o modificado por los otros factores involucrados- no es astrología científica, y no dará una interpretación verdadera. Las declaraciones, verdaderas en sí mismas, deben ser unidas intelectualmente en cada natividad particular con otros factores particulares de esa natividad, y entonces, y sólo entonces, se describen las peculiaridades de los casos individuales.

SOL EN ARIES

En Aries el Sol está en su exaltación, muy poderosa y brillante, con ese primer resplandor y júbilo que se asocia con la primavera. Sin embargo, Aries está bajo Marte, como regente, y esto tiende a sacar las flechas del carcaj de Apolo. En este signo, el Sol a veces es apto para matar. Aries gobierna la cabeza en el hombre, y siendo también el comienzo del zodíaco, tiende a llenar la mente del nativo con una ambición extrema para llevar a cabo empresas atrevidamente originales pero prácticas. Guillermo I de German y Bismarck, que construyeron el Imperio Alemán a partir de las ruinas de las luchas de la Edad Media y de las Guerras Napoleónicas, ambos tenían el Sol en este signo. También lo habían hecho Thiers que restauró la República Francesa tras la caída de Sedán y las llamas de la Comuna, y Gambetta, que contribuyó en gran medida a la misma obra. Ocurre con frecuencia que las ideas del nativo son consideradas impracticables o imposibles por aquellos a quienes se las comunica. Fue una suerte para Bismarck que su rey tuviera la misma posición solar, porque es característico de esta gente que, a menos que la vigorosa energía que manifiestan en la concepción de sus ideas muestre un resultado inmediato, su interés puede decaer y surgir otra idea de igual valor, la vehemencia reemplaza a la primera. Es sumamente necesario que el nativo adquiera paciencia y perseverancia. La mente debe ser entrenada para continuar en un solo canal, y la disipación de las fuerzas de la vida debe ser guardada con sumo cuidado. El nativo no debe contentarse meramente con imaginar su carrera; además, no debe retraerse del trabajo preparatorio que es esencial para hacer que las ideas fructifiquen.

La constitución de Aries está bastante bien equilibrada; es poderosa pero delicada. Hay una tendencia decidida a sobrecargar el cuerpo, ya sea intelectual o físicamente. Sin embargo, no hay peligro de sobreesfuerzo nervioso. Las personas de Aries generalmente carecen de cualidades psíquicas y espirituales. Los peligros para la salud son indicados por los planetas involucrados, pero las fiebres y la apoplejía son principalmente de temer, y el nativo también puede sufrir dolores de cabeza y otras aflicciones de esa extremidad del cuerpo. La expresión suele ser autoritaria, a veces incluso violenta, y el semblante a veces puede estar rojo, mientras que es probable que tenga algún lunar o marca de nacimiento en la cara. En sí misma, esta posición del Sol no promete una gran longevidad. Es probable que las enfermedades se agraven por la Disposición, que suele ser descuidada e incluso despreciativa de la salud; los apetitos son a veces excesivos y las pasiones necesitan control. Hablando en general, este es un mejor lugar para el Sol en un nacimiento masculino que en uno femenino.