EL MUNDO ASTROLÓGICO DEL LIBER NOVUS (Libro Nuevo) DE JUNG XLI

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LIBER NOVUS (Libro Nuevo) DE JUNG by Liz Greene

EL ANIMA, LA LUNA Y LA SERPIENTE

En un privado y en una conversación registrada por HANNI BINDER, Jung incluso ofreció interpretaciones de 'palabras clave' de las veintidós cartas de los Arcanos Mayores.

 Dio la siguiente interpretación para La Gran Sacerdotisa (*):

Sacerdotisa Sentada. Ella lleva un velo. Sobre sus rodillas hay un libro. Este libro está abierto. Ella está en conexión con la luna. Sabiduría oculta. Mujer pasiva, eterna.

La suma sacerdotisa de Jung, a diferencia de la de Waite, "lleva un velo", al igual que la figura de su pintura. Ya sea que Jung tuviera la intención de representar a Salomé o una potencia lunar más universal en su pintura, su imagen parece tener una fuerte conexión con la carta del Tarot de La Suma Sacerdotisa. Ambas figuras son guardianes de misterios secretos y se encuentran en la puerta de entrada al inframundo; y ambos son personificaciones de la Luna.

LA HIJA DEL ERUDITO (Imagen 6)

El encuentro del 'yo' de Jung con Salomé y Elijah, al que dio el título de 'MYSTERIUM', concluye la primera parte del LIBER NOVUS.

La siguiente figura femenina con la que se encuentra Jung es la pálida y fantasmal Hija del Erudito, a quien Jung descubre en un pequeño castillo rodeado de "aguas tranquilas y oscuras de un pantano" en un bosque oscuro. Incluso sin referencias lunares más tarde en el texto, la pintura del castillo de Jung retrata un paisaje dominado por la Luna creciente, al igual que su pintura de Salomé está dominada por la 'Luna de sangre' de un eclipse lunar (ver imagen 6). Cuando entra por primera vez en el castillo, el "yo" de Jung cree que el erudito vive solo. Pero cuando se da la vuelta y se sacude en un intento de dormir, una 'chica delgada, pálida  como la muerte', aparece en la puerta de su habitación. No da nombre, pero le dice a Jung que es la hija del anciano y que el erudito "me tiene aquí en un cautiverio insoportable" porque es su única hija y la imagen de su madre, que murió joven. Jung inmediatamente se enamora de ella:

ES HERMOSA. UNA PROFUNDA PUREZA DESCANSA EN SU MIRADA. 

Ella tiene un alma hermosa y poco mundana, una que quiere entrar en la vida de la realidad. . . ¡Oh, esta belleza del alma! Pero ella no es tan poco mundana como asume Jung; su comprensión del valor de la vida ordinaria es mayor que la de él. La breve conversación que siguió se centra en la importancia de lo encarnado frente a lo puramente abstracto y filosófico. La niña le informa a Jung: 'SÓLO LO QUE ES HUMANO Y LO QUE LLAMAS BANAL Y TRILLADO CONTIENE LA SABIDURÍA QUE BUSCAS'. Mientras lo deja, le dice que trae saludos de Salomé. Luego, su forma se disuelve en la oscuridad: la tenue luz de la luna penetra en la habitación. Donde ella estaba, algo sombrío yace: es una profusión de rosas rojas.

La descripción de Jung de la niña, delgada y pálida como la joven Luna creciente con la que se asociaba a la virginal Perséfone en el mito griego, pertenece al reino lunar; también lo hace la 'composición de lugar'. El 'agua tranquila y oscura del pantano' que rodea el castillo recuerda la imagen de La Luna en el Tarot de WAITE, con su pálida luz brillando sobre un 'abismo de agua'. Jung, discutiendo el significado de esta carta del Tarot con HANNI BINDER, le informó: 'UN CANGREJO DE RÍO SALE DEL AGUA. ES DE NOCHE. LA PUERTA AL INCONSCIENTE ESTÁ ABIERTA».