Astrología Humanística (Natal) Por Gregory J. de Montfort
Tiempo Biológico
Nuestra exploración del tiempo
personal comienza con los ritmos biológicos básicos que los seres humanos
comparten con otros animales.
Temperatura corporal del hombre, la presión arterial, la respiración, la
frecuencia del pulso, azúcar en la sangre, la hemoglobina y los niveles de
aminoácidos varían sobre una base diaria.
El nivel de hormonas suprarrenales y las concentraciones de bio-químicos
en el sistema nervioso también varían sobre una base diaria.
Las mujeres están especialmente
sujetas a ciclos mensuales de hormonas que influyen no sólo en la fisiología,
sino también en las emociones, el rendimiento y los sueños. Los cambios estacionales ocurren en hormonas,
azúcar en la sangre y otras funciones corporales importantes. Los ciclos anuales en el metabolismo del
calcio se verificaron a la mitad en humanos.
Cuando estamos sanos, estos ciclos múltiples están bien integrados y el
resultado es un sistema relativamente estable.
Estos ciclos integrados actúan como guardianes del tiempo para nuestras
variaciones en energía, emoción, pensamiento, sueños y actitudes.
Nuestra conciencia subjetiva del
tiempo comienza antes de que el lenguaje se desarrolle. Los bebés pequeños muestran comportamiento
rítmico en la cuna. Hasta los nueve
años, el tiempo parece ser ampliado y cambiando lentamente. Los niños no tienen la capacidad de ordenar
eventos y clasificarlos como lo hacen los adultos. La tasa fisiológica podría influir en nuestra
percepción del tiempo y la duración. Los
cambios metabólicos pueden alterar la conciencia del tiempo. Se ha demostrado que los cambios de
temperatura alteran la estimación del tiempo.
Hay muchos factores que deben influir en nuestra conciencia del tiempo.
Biológicamente, el tiempo está
determinado por factores externos como la rotación de la tierra, la órbita de
la luna y las estaciones del sol. Los
factores internos incluyen sistemas cíclicos de diversos productos químicos de
sangre y grupos de tejidos. Debe haber
sensores internos y externos que nos conecten con el tiempo biológico, los
relojes biológicos inherentes. Los
sistemas internos oscilantes se sincronizan generalmente a un alto grado y
proporcionan así una base de tiempo biológica que se sintoniza a los ciclos cambiantes
externos de los relojes astronómicos. La
edad es un factor importante en el establecimiento de la tasa de los ritmos
biológicos y la influencia de la experiencia del tiempo.
Personalidad y tiempo
La personalidad
ejerce influencia sobre la experiencia personal del tiempo. Las personas emocionales (TIPO DE SENTIMIENTO-
Predominio del elemento agua) ven el tiempo como continuo y circular porque el
presente evoca el pasado que da sentido al presente. El presente se compara siempre con los
acontecimientos pasados para que el contenido emocional sea revelado. La duración de una experiencia es menos
importante que la intensidad de la emoción relacionada con la experiencia. En general, el tiempo es menos importante
para las personas emocionales que la emoción.
Los individuos intelectuales
(TIPO DE PENSAMIENTO, predominio del elemento aire) también ven el tiempo como
continuo, pero lineal en vez de circular.
El pasado da lugar al presente que a su vez da nacimiento al futuro en
ordenada sucesión. El presente siempre
está siendo probado en contra del proceso en curso para asegurar una evolución
ordenada. La importancia de una
experiencia en términos de patrones de desarrollo es más importante que la
duración o el contenido emocional. En
general, el tiempo es menos importante que los procesos ordenados y los
principios claros de comportamiento. El
flujo ordenado del tiempo es más importante que el pasado, presente o futuro.
Las personas que están orientadas
principalmente hacia los sentidos (TIPO DE SENSACIÓN, predominio del elemento
tierra) ven el tiempo como discontinuo y momentáneo como pasa la marcha de los
acontecimientos, cada uno independiente y completo en sí mismo. El momento surge y haber sido experimentado
es reemplazado por un nuevo momento fresco para ser experimentado. Cada momento
es sopesado por su contenido en términos de realidad física concreta y
actividad física. La importancia de cada
momento depende de la intensidad de la sensación y la acción, así como la
gratificación lograda. La duración no es
experimentada como tal por los tipos sensoriales. El tiempo es menos importante que la
intensidad de la experiencia inmediata.
El pasado y el futuro no tienen importancia en comparación con el
presente.
Los individuos intuitivos (TIPOS
INTUITIVOS, predominio del elemento fuego) también ven el tiempo como
discontinuo, pero experimentan posibilidades como algo más real que el momento
presente. El futuro es vislumbrado y
entonces el presente es manipulado hacia esa visión. El presente se evalúa en términos de su
importancia en la realización de un futuro particular. La importancia de una experiencia radica en
las posibilidades que sugieren y / o cumplen.
El tiempo es menos importante que la inspiración y visiones brillantes
de futuros posibles. El futuro es más
importante que el pasado o el presente.
Hay una progresión natural a
través de este sistema de psicotipos que es una función de la edad y la madurez
personal. Los niños muy pequeños tienden
a ser sensuales en la orientación y se preocupan por el presente. Los adolescentes ejercen su intuición y
disfrutan de brillantes visiones de futuros interesantes. Se espera que los adultos maduros se
equilibren en su perspectiva de tiempo y utilicen la retrospectiva y la
previsión para llevar a cabo los planes y procesos necesarios. Los ancianos suelen estar orientados hacia el
pasado y emocional en su participación en las tradiciones y recuerdos. Algunas personas no siguen este
desarrollo. Una gran cantidad de conflicto
entre los diferentes grupos de edad se puede remontar a estas diferencias en
perspectiva de tiempo y psicotipos.
William Lilly -Master Astrologer |