LOS PRINCIPIOS GENERALES DE ASTROLOGÍA LXXIV

 

LOS PRINCIPIOS GENERALES DE ASTROLOGÍA LXXIV

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LOS PRINCIPIOS GENERALES DE ASTROLOGÍA

Aleister Crowley y Evangeline Adam

Debe tratar de superar cualquier dolor que pueda tener, porque si lo cuida, tendrá un efecto muy desorganizador en su salud. SU CORAZÓN ES TANTO SU PUNTO FUERTE COMO SU PUNTO DÉBIL, PORQUE SU VITALIDAD ES TAN ENORME QUE A VECES LA EXAGERA Y EJERCE UNA GRAN PRESIÓN SOBRE SUS PODERES. Su corazón es particularmente propenso a dilatarse e hipertrofiarse. La última condición es de hecho bastante característica del nativo de Leo y puede considerarse normal a menos que esté extraordinariamente marcada. Su diagnóstico no debe alarmar indebidamente al médico.

Características morales

El carácter moral del nativo de Leo puede ser mejor entendido por aquellos que han hecho un estudio íntimo de los ritos del dios Sol. Es la figura real y trágica, intensamente consciente tanto de su gloria como de su destino, y que posee una confianza infinita en su resurrección. Por tanto, representa a la humanidad en su sentido real y sacramental. Lleva constantemente en sí mismo este conocimiento subconsciente. EL ÓRGANO TÍPICO DE LEO ES EL CORAZÓN. El nativo de Leo tal vez no tenga la comprensión analítica del universo que encontraremos asociada con Acuario -su comprensión es subconsciente- pero en un aspecto supera incluso al nativo de Acuario, porque no solo considera toda la vida como una, pero lo percibe como una ceremonia sagrada de un carácter totalmente divino. Por supuesto, en el tipo ordinario esto equivale a poco más que el ejercicio de las tres virtudes cardinales Fe, Esperanza y Amor, pero en los tipos más grandes hay una percepción del universo entero como una fiesta eterna, un espectáculo interminable de alegría en el que El sufrimiento no es más que un incidente necesario para enfatizar la realidad de la felicidad. LA ADVERSIDAD ES NECESARIA PARA RESALTAR LA VERDADERA DULZURA DEL CARÁCTER, Y SOLO EN EL CLIMA QUE TIENE UN TOQUE DE ESCARCHA SE ENCUENTRA EL SABOR MÁS COMPLETO EN LA FRUTA. El carácter del nativo de Leo es audaz y confiado, su porte seguro y su semblante señorial. La mayoría de los otros tipos lo respetan o le temen espontáneamente, y él se crea una gran cantidad de enemigos a través de su envidia instintiva. Aquí volvemos una vez más a la figura simbólica del dios Sol, asesinado por la envidia de sus hermanos. LEO PRODUCE LUCHADORES EN LUGAR DE TRABAJADORES. Como regla general, no tienen tanta capacidad de esfuerzo continuo como los nativos de Tauro. No luchan tan bien en la batalla cuesta arriba. Son heridos más fácilmente. Esto también se aplica a las cualidades de lucha: el búfalo, una vez que se despierta para la batalla, es un oponente mucho más terrible que el león. El orgullo de Leo lo obstaculiza bastante, incluso en la lucha; quiere luchar con armas de caballero. No le gustan los detalles. NO TIENE LA CAPACIDAD DE PREPARACIÓN A FONDO PARA LA GUERRA, COMO HAN DEMOSTRADO LOS ALEMANES. No puede prepararse industrialmente ni desarrollar un sistema elaborado de espías. Le gusta ir a la batalla con sus banderas ondeando y sus bandas tocando. Su naturaleza es extraordinariamente noble; detesta lo mezquino, lo bajo, lo tacaño, y en un conflicto donde estas cualidades son la esencia del éxito, a veces es más bien un fracaso. Por otro lado, valora la gloria más que los beneficios materiales. NO HACE UNA GUERRA COMERCIAL; DESEA EL IMPERIO UNIVERSAL. Francia, que está gobernada por Leo, ilustra este espíritu. Es interesante notar que el último Napoleón tenía al Sol en este signo.