En la parte 1, hemos mostrado la utilidad de usar una carta horaria para responder preguntas específicas por medio de un mapa levantado para la hora en que la pregunta es formulada o entendida por el astrólogo. Enfatizamos la importancia de la comprensión correcta de la pregunta por parte del astrólogo.
La Carta Horaria de Consulta, otra fase del arte horario, puede ser de grande valía. Ella es levantada para el momento de la consulta marcada por el cliente - y, naturalmente, ajustada de acuerdo con la necesidad, si el cliente llega atrasado o adelantado.
Para esta Carta Horaria de Consulta no es preciso hacer una pregunta específica. Sin embargo, ella frecuentemente indica las condiciones con las cuales el cliente va a afrontar en breve, o sobre las cuales va a querer conversar. Aunque la mayoría de nosotros huya del sensacionalismo, puede causar mucho impacto (principalmente para quien inicia su contacto con la astrología) ver al astrólogo, en el comienzo de la consulta, decir al cliente que parece que él está preocupado con un determinado problema - y eso antes de que el cliente pueda mencionarlo.
La Carta Horaria de Consulta muchas veces permite identificar rápidamente alguna situación venidera que debe ser confirmada por la carta natal, por sus progresiones y tránsitos. Esa carta puede ser usada para responder a cualesquier pregunta específica que el cliente pueda hacer - aún cerca del fin de la sesión, tal vez una hora y media tras la hora de la carta.
Esa aparente contradicción con énfasis en la exactitud de la hora de la pregunta no significa problema alguno. En verdad, la Carta horaria de consulta está reflejando las condiciones que probablemente afectarán al cliente, o los problemas que él está enfrentando.
La carta contiene la respuesta a esos problemas. El astrólogo decide si quiere abordar esas indicaciones en el inicio o en el fin de la consulta. Si, como acontece frecuentemente en mi consultorio, dos amigos o parientes llegan juntos para consultas en la misma tarde, siempre dejo que escojan quién será el primero. O la carta de aquel que escoge ser el primero coincide con las condiciones que él está viviendo, o con los problemas que desea discutir.
De la misma forma, el segundo cliente y las condiciones que está viviendo son descritas con exactitud por la segunda carta horaria - basado en la hora de la segunda consulta. No sé explicar por qué - pero continúo sorprendiéndome con la linda armonía entre el hombre y las estrellas.
Los métodos usados para interpretar una Carta Horaria de Consulta son semejantes a los de la carta Horaria común, y cada astrólogo acaba desarrollando su estilo particular de interpretación. En general, doy especial atención a la casa que contiene el regente del Ascendente y la Luna. Los planetas en aspecto con ellos indican los acontecimientos favorables o tensionantes que están por venir, de acuerdo con el aspecto. Las casas ocupadas y regidas por esos planetas revelan las áreas de la vida o las personas involucradas.
La naturaleza de cualquier planeta en elevación y la casa por él regida dan pistas sobre las condiciones futuras, de la misma forma que los planetas que aspectan el planeta en elevación, a través de su posicionamiento por casa o regencia.
Muchas veces se aprende más viendo ejemplos y trabajando con la carta Horaria de Consulta de que intentando asimilar más reglas. Las cartas que siguen deben ayudar al lector a entender como una carta horaria puede ser enfocada y usada.
CARTA HORARIA DE CONSULTA 1
Venus (rigiendo mi cliente) está recibiendo una cuadratura de su corregente (la Luna). La Luna, sin embargo, también rige a 10ª Casa, relativa al trabajo o uno de los padres. Esto sugiere problemas en lo tocante a una de esas áreas - o a ambas. La Luna (co-regente de la 1ª Casa), en cuadratura con Marte (regente de la 7ª Casa) generalmente sugiere la posibilidad de tensiones en la boda, en asociaciones o en el enamoramiento.
Urano en elevación (regente de la 5ª Casa) sugiere que va a acontecer algo inesperado relacionado con algún hijo. La Luna en trígono con Júpiter en la 9ª Casa (regente de la 3ª) sugiere un viaje, algún tipo de comunicación o contacto con un pariente.
Esta cliente era una mujer divorciada de media edad, abuela y que trabajaba fuera. La hija y la nieta vivían en otro Estado. Mi cliente estaba saliendo con un hombre pero no estaba optimista en relación a las perspectivas de la boda. Comencé la consulta examinando Urano (regente de la 5ª Casa) en elevación y retrógrado. Yo dije que a ella no quedara Sorpresa si la hija volviera. Y también que podría haber un viaje o algún contacto placentero con la nieta (Luna en trígono con Júpiter en la 9ª Casa la de los nietos). La nieta, de quien ella le gustaba mucho, es una Geminiana (Júpiter en Géminis.)
Continuando, le informé que la boda tenía pocas oportunidades de acontecer y ni era deseable (Luna en cuadratura con Marte), y que ella podría venir a tener problemas con la madre y/o con el trabajo (Luna en cuadratura con Venus). Sin embargo, la Luna (la madre) está en trígono con Júpiter, en la 12ª Casa, la de la madre, sugiriendo la posible necesidad de ella ser hospitalizada o de ir para una casa de reposo, lo que sería provechoso.
Dos días tras la consulta, la hija y la nieta vinieron del otro Estado. Mi cliente no se casó. Realmente, surgieron problemas tanto con el empleo como con la madre, que fue hospitalizada. La hospitalización fue benéfica en el sentido de haber estabilizado el estado de salud de la madre, y tener- a la vez, un alivio en gran medida, debido a la presión de cuidar de un enfermo en casa.
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