Con la presente inicamos un ciclo de tres cartas sobre "Relaciones", en donde John Frawley nos explica de manera magistral la dinámica del tema.
Para muchos de nosotros, nuestro primer acercamiento con la astrología era examinar con desesperación las columnas de los periódicos sobre signos solares para ver si todo el encanto del amor estaba a nuestro favor. Como una indicación del estado de nuestros afectos, la previsión de los signos solares, nos parecía más convincente, de algún modo, que las respuestas dadas tirando las hojas fuera de las flores o ser muy pacientes sin que fuéramos engañados. Más convincente, si no, notoriamente más fiable.
Juzgando el potencial de lo que son las relaciones, hoy en día este es un asunto de vital importancia en la astrología. La mayoría de las técnicas disponibles, sin embargo, mientras que pueden dar mucha información sobre la manera en que una pareja nos considerará, son incapaces dar una respuesta clara a un sí o un no, ninguna respuesta a la pregunta básica: “¿esta relación funcionará? " Qué es lo que nosotros realmente queremos saber.
El método moderno de juzgar las relaciones más de uso y de preferencia entre los astrólogos es el de la Sinastría: la comparación de dos cartas de nacimiento pertinentes. Los ejemplos en los libros del texto son impresionantes: Romeo y Julieta y diez mil conexiones entre sus cartas. Pero lo que los libros de texto nunca muestran son las Sinastrías entre Romeo y 10 millones de otras personas con las que él pudiera quedarse, con resultados posiblemente más prometedores que su romance estrellado y enfermizo con Julieta. Muchas de estas Sinastrías habrían tenido muchas señales de afecto compartido.
Ciertos testimonios fuertes en Sinastría pueden indicar una relación duradera, particularmente si hay combinaciones que las ameriten: pero sería un astrólogo valiente quien haga una predicción clara de este tipo: "Sí, usted se casará con este hombre", tomando como base solo esta información.
Las conexiones entre las dos cartas, pueden ser muy aproximadas, pero los motivos que describen a las personas en las relaciones duraderas son infinitamente múltiples, si no plenamente perversas. Las chifladuras psicológicas particulares que me hacen rechazar con desprecio el amor a Ermintrude pero que van con su extraña hermana Esmeralda, están indudablemente presentes en mi carta de nacimiento, pero la delineación exacta que oculta una carta, requiere de una sutileza que pocos astrólogos poseen. Nosotros necesariamente no establecemos relaciones con aquéllos con quienes aparentemente vamos a estar muy satisfechos.
La Sinastría es capaz de establecer una ramificación infinita. Nosotros podemos comparar los ingresos solares, las cartas progresadas, las cartas basadas sucesivamente en Venus o Marte o la Parte de Matrimonio y ad infinitum con otros métodos mientras tengamos paciencia. Ellos nos van a decir mucho sobre las relaciones.
Nos podemos aislar por mucho tiempo, estudiar y comparar cartas, adquirir mucha información, pero aún así todavía no tenemos alguna respuesta. Pero la misma existencia de todas estas cartas traiciona otra gran desventaja: dos cartas cualesquiera que sean tienen Sinastría.
Yo puedo comparar mi carta de nacimiento con Lauren Bacall que podría indicar una turbulenta pasión, la misma que para Antonio y Cleopatra revelaría que están inhibidos emocionalmente. Todavía desafortunadamente, claro, para la Srta. Bacall, - nunca nos hemos encontrado; ni no tenemos la más mínima probabilidad de lograrlo, la Sinastría solo puede mostrarnos el potencial de una relación: los habitantes fantasmales de esas tierras lejanas no pueden decirnos que se convertirán en carne y sangre en nuestras vidas, en el mundo real aquí y ahora. Qué es claro, nuestra preocupación principal: tendríamos mucho consuelo si sabemos que ella podría amarme si sólo....
Una vez se establece una relación, la Sinastría es una herramienta útil para mostrarnos cómo se relacionará la pareja. También si las personas que conforman esa pareja tendrán futuro.
Cartas compuestas
Hay varios métodos que nos permiten acercarnos a este asunto. Las cartas compuestas, se despliegan para combinar el nacimiento de ambas personas en una sola carta. La condición de la séptima casa y su gobernante puede dar valiosas pistas que nos permiten establecer el nivel de funcionamiento de esta relación.
Aun cuando las indicaciones en la carta sean muy positivas. Saturno en la séptima, para el caso, hace pensar en un gran obstáculo para que se dé un verdadero amor: a menudo una o las dos partes está ya comprometida, o hay alguna otra obstrucción material que perjudica el romance.
Una carta de relación puede desplegarse tomando el tiempo en que la pareja se encontró por primera vez, pero como es lo corriente, esto fácilmente no se recuerda, podemos entonces tomar cualquier otro momento significativo.
Es importante tener en cuenta aquellos momentos bastante vistosos: o cuando alguno de los dos se declara; o cuando se da el primer beso - sin embargo mire su reloj para que pueda tomar el tiempo de algún suceso mágico del momento.
Todas estas cartas son válidas: pero de nuevo, así como con cualquier carta de nacimiento, busque todas las posibilidades y potenciales para que pueda confirmar si realmente sucederán, su tiempo y si la realización de los mismos exigen esfuerzos. Si realmente no conseguimos que hacer con nuestras vidas, podemos, claro está, trazar cartas compuestas o de Sinastría, progresiones, tránsitos inversos, los ingresos solares y cualquier otro método que sea pertinente.
Esto puede ser fascinante, como si se tratara de un calidoscopio, pero se necesita mucha práctica
La Respuesta
Si nosotros queremos una respuesta a la pregunta esencial “¿Esta relación trabajará?" rápidamente y con precisión, con ningún problema o si es algo potencial, o es real, las respuestas a estas preguntas solo se consiguen y de manera óptima con astrología horaria: de una manera muy simple.
En horaria siempre trazamos una carta para el momento en que se establece una pregunta. El Ascendente su regente y la Luna representan al consultante - la persona que hace la pregunta. Si la pregunta es sobre relaciones, la séptima, casa y su regente muestran lo consultado, la persona por la que ellos están preguntando.
Como un principio general a destacar, si los planetas que representan al consultante y a lo consultado se encuentran, tenemos una relación; si ellos no lo hacen, no habrá una relación.
En la práctica, sin embargo es un poco más complejo que esto; pero éste es el principio, y puede - a veces - ser sincero.
Veamos algunos ejemplos para clarificar el asunto.
Carta 1 ¿Yo me encontraré de nuevo con él?
Claudia se interesó de manera especial por un hombre que había conocido en una fiesta. Aunque ella sólo le había hablado brevemente, ella se había convencido que él era el hombre para ella: pero aun así, ella no le pidió el número de teléfono, la dirección, o cualquier otra indicación que podría servirle para llamarlo o buscarle de tal manera que se pudieran ver.
Después de pasar algunos días de aflicción, esperando que sus amigos más cercanos le dieran pistas, ella me pidió que trazara una carta horaria y la analizara, la pregunta “¿Yo me encontraré de nuevo con él?
El Consultante siempre es mostrado por el regente de la primera casa, así que Claudia se representa por Mercurio regente de Virgo, y también por la Luna, qué siempre es la corregente del consultante. Como la pregunta se asocia con una relación, lo consultado se muestra por la 7ª casa cuya cúspide cae en Piscis.
Para la astrología tradicional Júpiter es el regente de Piscis que se convierte en el significador de la pareja. Júpiter se ubica en la casa 9ª, la de los viajes largos, la tercera desde la 7ª, efectivamente él estaba por poco tiempo en Inglaterra y dentro de poco debería regresar a su país de origen.
La quinta casa, que es la de placer, a veces se asocia con asuntos del amor, así que podríamos estar tentados para localizar al hombre allí. Pero para poder usar la quinta casa en lugar de la séptima, la pregunta tiene que tener relación como pasarla bien en una noche, o de un asunto que está en contraste con una relación estable.
Para dar una respuesta positiva. Necesitaba encontrar una conexión entre Mercurio y o la Luna para Claudia y Júpiter para el hombre. Si Claudia hubiera visto a este hombre moverse en el piso al lado del suyo con una jarra de oro en su mano, yo no habría necesitado mucha evidencia de la carta para dar el juicio “Sí, usted se lo encontrará de nuevo."
Basado puramente en el sentido común, las circunstancias aquí no apuntan a un resultado positivo, como para ver algo bastante espectacular en la carta antes de juzgar “Sí.” Y hay evidencias: la Luna a 9 grados de Virgo aplica inmediatamente un sextil a Júpiter a 10º Sagitario. Muy positivo.
Pero también hay un testimonio negativo serio. Dentro de ocho grados y medio del Sol, un planeta está combusto: sus poderes están quemados y se destruyen. Mercurio, El significador de Claudia, está retrógrado, es decir se mueve al revés, hacia el Sol, entrando simplemente en el área de combustión. Su Luna es igual peor aún ya que ella marcha hacia una luna nueva, su misma posición la hace más débil. Todos los tres planetas están en Acuario, gobernados por Saturno, Señor de la restricción.
Claudia sentía que ella no podía hacer nada en esta situación, excepto desear y hacer una pregunta horaria con la esperanza que esto le haría bien.
Para perfeccionar el aspecto con Júpiter, la Luna se mueve a 10 Acuario: esto completa la conjunción con el Sol, dejando la Luna completamente sin fuerza. Ellos no comparten dignidad: no hay ninguna recepción entre ellos. A pesar de la perfección inmediata del aspecto, esta carta es demasiado débil para que algo pueda pasar: el juicio solo podría ser: No, a pesar que el aspecto entre la Luna y Júpiter que es un potencial para un resultado positivo, pero las naturalezas particulares y circunstancias de las dos personas involucradas previenen de que algo pueda pasar.
La astrología está reflejando simplemente la verdadera situación en la vida: él no estaba interesado (Júpiter en Sagitario solo le importa a Júpiter ya que está en domicilio) y ella no hizo ningún esfuerzo, así que nada pasó.
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1 comentario:
Hay un error que vamosa corregir:
El texto dice:
Para la astrología tradicional Júpiter es el regente de Piscis que se convierte en el significador de la pareja. Júpiter se ubica en la casa 9ª, la de los viajes largos, la tercera desde la 7ª, efectivamente él estaba por poco tiempo en Inglaterra y dentro de poco debería regresar a su país de origen.
Lo correcto es: la novena casa desde la 7ª que es la casa tres radical.
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