Astrología, Religión y Zona Horaria II. Por Jaime Ch Londoño
Oh! Sublime ignorancia, o sencilla
sencillez, oh gloria inmarcesible, oh júbilo inmortal.
Ok, para terminar
con esta primera parte relacionada con el tema, se puede concluir que las
religiones cristianas se basan en la interpretación mecánica, a letra muerta y
literal de la biblia. Sus seguidores, no han podido entender que así como los
pulmones no están capacitados para respirar debajo el agua, así también la
mente no está capacitada penetrar, escudriña, razonar y entender el mensaje oculto tras los mitos y parábolas
que se encuentra velados a lo largo y ancho de la biblia.
Pero, si recurrimos
a un equipo de buceo podemos sumergirnos en el mar, observar, tomar fotos,
filmar y traer muestras de lo que allí sucede. Lo mismo podemos hacer cuando se
trata de interpretar la biblia, es decir, nos podemos valer de un artificio
para navegar bajo sus profundidades, ese artificio se llama el lenguaje mágico,
que se apoya en la Qabalah y la
Gematría, no existe otro medio para lograrlo.
El Martín Lutero
de la Astrología fue el señor Alan Leo, que inspirado en los teósofos y el
hinduismo cambiaron la astrología a una base psicológica y religiosa. Por allá
a comienzos del siglo XIX, la ciencia se estableció como el nuevo evangelio
mundial y oficial, más todo lo que no tenía su aprobación y no estaba dentro
del canon así establecido, olía a brujería, pseudo-ciencias, charlatanería e
ignorancia; quedaban confinados y echados al cubo de la basura,
desafortunadamente nuestra amada astrología no fue la excepción. Quedaba así
establecido que el ser humano se convertía en el amo y señor del universo, que
podía manipular las leyes de la naturaleza a su antojo, como dijo Friedrich
Nietzsche: Dios ha muerto, reconfirmado por el mesías Karl Marx: la religión es
el opio del pueblo.
El Señor Alan
Leo, al husmear lo que se venía contra la astrología, se puso a pensar… y
EUREKA!, encontró la fórmula mágica, para al menos, rescatar de la astrología
lo que se podía. Esto hizo que Leo y sus seguidores se sintieran igual como los
científicos, dueños de sus destinos y capitanes de sus almas. Si el universo es
una máquina que se puede manejar y controlar para beneficio propio, de acuerdo
con Leo, la astrología no puede ser una excepción, a esta regla; en la era de
la arrogancia científica, tenía que existir, algún mecanismo, que pudiera
aplicarse al entorno astrológico y rescatarla, de los dogmas y fatalismo de la
astrología antigua: surge entonces el concepto del libre albedrío.
Ya estábamos en
libertad para controlar nuestra carta astrológica y negociar con ella, es que
Saturno y Marte que fueron, lo son y lo serán planetas maléficos, es cuestión
de un pasado que no concuerda con los nuevos descubrimientos, avances
tecnológicos y científicos. Y los malos aspectos se cambian a aspectos de
tensión, desafíos y retos, que bajo la orientación de un terapeuta, los podemos
reversar, transmutar y disciplinar en aspectos de facilidad y
relajantes. Lo que Alan Leo y la escuela europea continuadora de sus logros no
entienden, es que la sociedad donde vivió y en la Europa actual, así con en otros países, se tiene otro tipo de
cultura, un desarrollo social y cultural muy diferente a los que vivimos en
este mundo del subdesarrollo. No podemos negar que probablemente este tipo de
astrología funcione en alguna medida en estos países de acuerdo con ese
concepto moderno de la astrología.
Pero…, como lo
podemos demostrar, esos conceptos no se pueden trasladar a la astrología
horaria. Uno puede aprender de acuerdo con su carta natal a usar a Marte y a
Saturno en aspecto de manera mucho más consciente y constructiva, pero no por
eso podemos escapar a sus efectos, no es fácil. Lo sorprendente es que este
método no funciona en Horaria, acá Saturno y Marte serán maléficos por secula
seculorum (por hoy, mañana y siempre). De ahí que la astrología horaria cayó en
descrédito, nacieron los horoscoperos, esas personas que hacen horóscopos en
los periódicos, y se establecieron las bases para la interpretación sicológica
de la carta. Del pasado no queda sino recuerdos.
Vaya a internet y
UD. no encontrará interpretaciones de signos, planetas y aspectos como lo
hacían magistralmente los antiguos. ¿A dónde fueron a parar Morin de
Villafranche, Henry Selva, un Claudio Dariot, un Firmicus Maternus, un Guido
Bonatti?.... Yo si sé a dónde fueron a parar: a los museos y al olvido.
Afortunadamente
En 1992, Robert Schmidt y Hellen Black asistieron a un Congreso de astrología en los
Estados, una conferencia organizada por las tres organizaciones internacionales
astrológicas. Allí se reunió con Robert
Hand y Robert Zoller sobre la viabilidad de un proyecto de traducción de la
historia de la astrología. Como resultado de esta reunión, se formó la
organización ARHAT (Asociación para la Recuperación de los textos astrológicos históricos). ARHAT era efectivamente una declaración de
intención de traducir al idioma inglés todo el corpus de escritos en la
tradición astrológica occidental, que han sobrevivido principalmente en griego,
árabe y latín.
Lo propuesto por ARHAT llegó un año más tarde,
en 1993, cuando Robert Schmidt desarrolló el plan para el Proyecto La
retrospección (basándose en el nombre de retrospección, el título de la revista
anterior en la historia de las matemáticas publicados por The Golden Hind
Press) y lo presentó a Robert Hand, que anunció el proyecto a la comunidad
astrológica en una conferencia astrológica en primavera.
El proyecto iba a ser una experiencia piloto
en la financiación de la investigación académica privada dentro de un grupo de
interés especial, como la comunidad astrológica. Las traducciones deberían ser hechas por
astrólogos que tuvieran esas habilidades lingüísticas necesarias, permitiéndoles
cobrar por su trabajo. Las traducciones
fueron vendidos por suscripción a los astrólogos individuales, que apoyaron el
proyecto para una variedad de razones.
Algunos deseaban utilizar los métodos astrológicos antiguos en sus
propias prácticas, o al menos pensaban que las futuras generaciones de los
astrólogos las podrían encontrar valiosas.
Otros simplemente se enorgullecían de apoyo a una iniciativa académica
que podría traer el honor a la comunidad astrológica y posiblemente conducir a
que sea tenida en serio por el mundo académico.
Pero desafortunadamente aún esto no llega como debería llegar a los astrólogos
modernos
En la década de
los ochenta La pastora Liz Greene y el Pastor Howard Sasportas fundan la
Iglesia de Astrología psicológica, ¡Qué belleza… SIN PALABRAS, quedamos
sorprendidos, y aún hoy en día mucho de los que aprendimos de estos jerarcas
eclesiásticos aún perdura en nuestras mentes, sinceramente, tenemos una deuda
de gratitud para con ellos. Antes a nadie se le había ocurrido utilizar variables
astrológicas para aplicarlas a conceptos y hechos psicológicos ¡Qué tetas tan
bien puestas las de esta mujer!, ah!!! Bienaventurados los que han succionado de
sus pechos rebosantes de vitalidad y sabiduría astrológica, porque ellos
heredarán la nueva tierra y el nuevo cielo prometido a los astrólogos que aún
no se han contaminado por el modernismo.
Compare con Lucas
11:27 (Mientras él hablaba, una mujer de la multitud exclamó: «¡Que
Dios bendiga a tu madre, el vientre del cual saliste y los pechos que te
amamantaron!) Esto nos
hace acordar de 1 Reyes 19:18:
El profeta Elías se queja ante Dios y le dice: Este pueblo te ha abandonado y cambiado por ídolos, se ha prostituido,
han dado muerte a otros mensajeros tuyos, y a mí me buscan para matarme.
¿Qué le contesta Dios?: Me he reservado
7.000 hombres que no han doblado su cabeza ante Baal (un ídolo, un dios
ajeno). Esto mismo podemos decir en astrología, todavía hay los que no
inclinarán su cabeza.
Los astrólogos
sicológicos cogieron el sartén por el mango y proclamaron como está escrito en
Mateo 12:30: Dice Jesús: El que no está conmigo, está contra mí; y
el que no recoge conmigo, desparrama.
Para los que no
se afiliaron a esta nueva doctrina, solo queda el llorar y crujir de dientes.
Pero mi reverenda
pastora: no todo lo que brilla es oro. Liz Greene aún no ha podido entender y
aceptar la regencia y exaltación de Mercurio en Virgo, extraño, porque ella
tiene su Sol y Mercurio en Virgo con Ascendente Escorpio. Tampoco acepta que
Venus tenga doble regencia: en Tauro y Libra, más bien se inclina a la regencia
de Venus en Libra, y ella dice el porqué, y aún espera y se quedará esperando a
que descubran el planeta que regirá a Tauro y a Virgo para que solo quede o la
regencia o la exaltación. Ella tiene un
muy buen trabajo que se llama EL SIGNIFICADO ALQUIMICO DEL HOROSCOPO, pero en lo
que no estamos de acuerdo es que para ella los alquimistas fueron soñadores y
utópicos que pretendían la consecución de algo imposible: transmutar el plomo
físico en oro físico; ella hizo bien al abordar el tema desde la perspectiva
simbólica y sicológica, en lo que aún no entiende ni entendió su cardenal JUNG:
es lo siguiente: UNO NO PUEDE HABLAR DE LO QUE NO SABE, DE LO QUE NO CONOCE, DE
LO QUE NO ENTIENDE, DE LO QUE NO HA VIVIDO NI EXPERIMENTADO, ninguno de los dos
descubrieron la materia prima, ninguno de los dos confeccionaron la Piedra
Filosofal, ninguno de los dos alcanzaron al Magnus Opus o Gran Obra, si lo
hubieran logrado, ninguno de los dos habrían llegado a donde llegaron… habrían permanecido
anónimos; ellos no conocieron la tradición y no tuvieron ni han tenido contacto con los alquimistas
genuinos, que existen, existen!. Lo mismo
sucede en astrología mi Reverenda Liz, la hay y aún anónima y quiénes la conocen
no han cometido la torpeza de hacerla pública,
para que no se distorsione ni se prostituya como ha sucedido con nuestra amada astrología.
William Lilly, Master Astrologer