CAPÍTULO TRES
PROGRESIONES SECUNDARIAS
EN RESUMEN, un planeta progresado tiene significado para un individuo ya que:
• Cambia de signo zodiacal,
• Cambia la dirección del movimiento,
• Forma relaciones con otros planetas progresados, o
• Enfatiza un grado del zodíaco.
Por supuesto, también pueden interactuar con la carta natal de la misma manera que un planeta en tránsito, formando aspectos de la carta natal y moviéndose a través de las casas.
Esto conduce a dos tipos de progresiones:
a) Progresiones que brindan información a través de los cuatro puntos mencionados en la sección anterior, es decir, no relacionadas con la carta natal. Esto significa progresiones relacionadas con otras progresiones u otra información zodiacal. Podría ser Mercurio progresado cambiando de signo, o volviéndose retrógrado, etc., pero sin formar realmente un aspecto de vuelta a la carta natal.
b) Progresiones que se relacionan con la carta natal de la misma manera que un tránsito. Esto significa progresiones que forman aspectos a puntos natales y se mueven a través de las casas natales, es decir, Mercurio progresado cambiando de casa o aspectando al Sol natal, y así sucesivamente.
Cuando las personas exhiben deseos intensos que surgen desde lo más profundo, desde el centro del ser, desde Dios o desde la intuición, entonces están manifestando una progresión del tipo no relacionado con la carta. Como sello distintivo de este tipo de progresión, las personas mostrarán una fe inquebrantable o una determinación sin concesiones. Cuando las personas expresan sentimientos o deseos pero están dispuestas a dejar que el mundo los cambie, entonces están manifestando una progresión relacionada con la carta. El sello distintivo de este tipo de progresión es tener el deseo de avanzar en cierta dirección pero también estar preparado para comprometerse en el camino.
LAS PROGRESIONES SON, POR LO TANTO, UNA FUENTE DE INFORMACIÓN MÁS RICA QUE LOS TRÁNSITOS. Acceden al ámbito del mundo interior y personal, mostrando tanto las motivaciones del día a día como las declaraciones o deseos inquebrantables de la vida.
Un buen ejemplo de esta personalización del Cosmos se puede ver si se reconsidera la vida de Juana de Arco usando nada más que las actividades del Cosmos (progresiones) durante los 19 días posteriores a su nacimiento.
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