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LOS PRINCIPIOS GENERALES DE ASTROLOGÍA
Aleister Crowley y Evangeline Adams
El último de nuestro grupo es Robespierre. Aquí Acuario está saliendo, Saturno justo debajo de la cúspide del Ascendente y Urano un poco debajo de él. Saturno tiene el semisextil de Venus y la cuadratura de Mercurio, lo que indica un abogado exitoso y plausible con sentido de la realidad, pero sin la carga de escrúpulos suficientes para obstaculizar su marcha hacia el poder. Urano en cuadratura con Júpiter recibe sólo la dudosa asistencia de un semisextil de la Luna, y aunque Júpiter está en la décima en su propia casa Sagitario, en trígono con Marte, esto no puede compensar una aflicción tan poderosa como la de Urano, aunque añade fuerza ejecutiva. a la ambición. He aquí un cuadro clínico de un hombre frío, duro, arrogante, ambicioso y sin escrúpulos, cuyo único alivio aparece en el ascendente Venus, que se acerca a una conjunción con Urano, y esto curiosamente refleja la tensión contraria de gentileza en su vida de hogar privado Así que de nuevo, como en todos los casos que hemos estado considerando, encontramos el más claro posible testimonio de la historia de la verdad de la astrología.
Tres políticos muy comunes son los presidentes Carnot, Faure y Loubet. Carnot nos tiene a Capricornio ascendente, con Saturno en semisextil con Marte y en trígono con Urano. Hay, por consiguiente, gran armonía entre la personalidad y el temperamento, pero no hay desarrollo de ninguna fuerza extraordinaria. Hay éxito, pero sólo éxito ordinario.
El presidente Faure tiene a Libra ascendente, y Venus está dentro de los 7° de la conjunción de Urano. Venus está en cuadratura con Saturno, y Urano con Júpiter, y aunque no hay una falta particular de unidad involucrada en estas configuraciones, no son fuertes, y la presencia de Marte en el Ascendente.
Emile Loubet es un tipo aún más suave. Él mismo para ser públicamente abofeteado en la cara en un hipódromo no es perjudicial para una fuerza de Personalidad como la que exige respeto universal, más particularmente en un gobernante. El pasivo y tranquilo Cáncer está saliendo, la Luna apenas toca la cúspide del Ascendente con el borde inferior de su orbe plateado, y está casi exactamente en oposición al Sol y Venus. Ella tiene el trígono de Urano, y esto asegura esa armonía general de carácter de la que hemos estado hablando. También asegura el éxito, pero ese tipo de éxito que le llega a un hombre, como diría un irlandés o un filósofo, "sin culpa propia".
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